NUEVA YORK.- El cónsul general de la República Dominicana en esta ciudad exhortó a los dominicanos recluidos en cárceles federales y estatales de los Estados Unidos y en otras naciones a que en caso de ser enviados de regreso a su país, lleguen dispuestos a reinsertarse de manera positiva a la familia y la sociedad, aprovechando las condiciones creadas por el Gobierno del presidente Danilo Medina para que se integren dignamente a una labor productiva.
El licenciado Carlos A. Castillo hizo la exhortación durante su reciente visita a la cárcel correccional Essex County Correctional Facility de Newark, Nueva Jersey, donde se reunió con 38 de 116 dominicanos confinados que le expusieron sus situaciones particulares y a quienes les explicó que a su llegada solo son recibidos por la Unidad de Reinserción de Repatriados (UNRE) de la Procuraduría General de la República y por la Dirección General de Migración (DGM).
“Es preciso que tengan conocimiento de que ya no se les hacen fichas ni participan otras agencias o instituciones como la Dirección Nacional de Investigaciones (DNI), la Dirección Central de Investigaciones Criminales (DICRIM) de la Policía Nacional y la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), como ocurría anteriormente”, expresó.
A los repatriados que son enviados en vuelos especiales del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés), generalmente desde el estado de Louisiana, se les ofrecen charlas sobre el proceso de la reinserción, tras ser recibidos en el Aeropuerto Internacional de Las Américas y trasladados al centro vacacional de Haina, en la provincia San Cristóbal.
“El presidente Danilo Medina ha venido ejecutando medidas para que a los dominicanos en el exterior se les ofrezca la protección necesaria y sean tratados en el marco de las estipulaciones de las leyes nacionales de los países donde residen y las normas establecidas por organismos internacionales vinculados a las migraciones”, expresó Castillo a propósito del inicio de un programa de visitas a cárceles donde hay dominicanos sentenciados, en espera de un veredicto o de ser repatriados.
Resaltó el hecho de que gracias a las disposiciones del jefe de Estado, los dominicanos repatriados reciben un tratamiento más digno, siendo recibidos por personal de la UNRE que les explica el proceso de reinserción que se inicia con su llegada y cada uno es procesado en el orden en que son recibidos, de acuerdo a la lista previa, tomándoseles sus datos biométricos -huellas dactilares y fotos- sin ser fichados por el DNI, la DICRIM y la DNCD, aunque por otras vías reciben las informaciones correspondientes que deben tener como autoridades preventivas y de control del Gobierno.
Conjuntamente con las fichas policiales se eliminaron las trabas en la obtención del documento de No Antecedentes Penales, el cual es emitido por la Procuraduría General de la República y no por la Policía Nacional y en el mismo tampoco se hace mención de que el ciudadano ha sido deportado. Esa certificación se expide a los dominicanos residentes en Nueva York, Nueva Jersey, Pennsylvania y Connecticut, entre otros estados, en la sede del Consulado localizado en el 1501 de la avenida Broadway, en Manhattan.
Una vez llegan al país, los repatriados son recibidos por sus familiares con los que se hacen coordinaciones previas a través de la UNRE, organismo que mantiene un programa de trabajo cotidiano para ayudarlos en todos los procesos ante las instituciones del Estado desde sus oficinas en la Plaza Francesa, situada en la avenida Abraham Lincoln a esquina calle Paseo de los Locutores, en Santo Domingo.
Trabajo coordinado
El cónsul Castillo instruyó al vicecónsul encargado del Departamento de Visas y Protección, licenciado Tamayo Tejada, quien lo acompañó en su visita a la cárcel Essex County Correctional Facility de Newark, Nueva Jersey, para que se trabaje en coordinación con la UNRE, dependencia de la Procuraduría General que dirige la licenciada Amparo Reyes, con el objetivo de que los repatriados aprovechen todos los programas sociales implementados por el Gobierno en su beneficio.
El Plan Social de la Presidencia de la República Dominicana les hace referimientos médicos a clínicas y hospitales, entre ellos Hospital Padre Billini, Hospital Traumatológico Dr. Ney Arias Lora y la Clínica Dr. Cruz Jiminian, así como el consultorio de medicina alternativa de la Armada en Santo Domingo, y el Hospital Regional Universitario José María Cabral y Báez, en Santiago.
Asimismo se ofrece atención médica especializada a los adictos a alcohol, violencia y drogas que son referidos a Hogares Crea para su tratamiento. También asistencia en la obtención de alojamiento temporal, el cual es proporcionado por Hogares CREA por medio de UNRE aún el repatriado no tenga adicción alguna.
Está establecido un protocolo de coordinación con el Seguro Nacional de Salud (SENASA) para las atenciones médicas que incluye tratamientos odontológicos.
Cuentas bancarias
A los repatriados se les orienta en el proceso de la obtención de cuentas bancarias en las diversas instituciones financieras del país y de manera especial se les explica la forma en que pueden solicitar y obtener préstamos y financiamientos para iniciar pequeños negocios a través del programa.
También sobre obtención de certificación y validación ante el Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología (MESCYT) de estudios realizados en el extranjero y facilidades para la realización de estudios universitarios y en el Instituto Nacional de Formación Técnico Profesional (INFOTEP) así como becas ante el Ministerio de Educación.
Asimismo reciben ayuda en la obtención de empleos y asesoría en la recuperación de fondos dejados en el extranjero al momento de ser repatriados, incluyendo la devolución de fianzas.
El programa de visitas a las cárceles donde están confinados dominicanos iniciado por el cónsul Castillo tiene como objetivo estudiar cada caso en particular para ofrecerles mayor protección, ya que hay muchos que han sido víctimas de errores judiciales en los Estados Unidos y otros de hechos relacionados a accidentes menores de tránsito y supuesto abuso de alcohol que no pueden ser considerados en materia criminal, sino como delitos menores.