La Vega RD.- Dos integrantes de una peligrosa banda de malhechores fallecieron y otros dos resultaron apresados y con heridas de balas luego de enfrentar a varios agentes policiales que les daban seguimiento luego que los cuatro sujetos asaltaron una envasadora de gas en la ciudad de La Vega, donde además en la acción se les ocupó tres armas de fuego, el vehículo en que viajaban y todas las pertenencias que sustrajeron del establecimiento comercial.
Los occisos fueron identificados como, Yonathan Rafael Ortega Disla, de 36 años y Juan Gabriel, mientras que los heridos son, Denny Rodríguez Espinal, de 27 años y Antony Martínez Vargas, de 26, quienes residen en Santiago.
Todos al ser depurados en los archivos policiales, entre ellos Ortega Disla figura con dos registros por homicidio y robo, en tanto que Martínez Vargas posee un registro por robo.
Al momento de ser capturados se les ocupó la pistola de marca y nuneración ilegible, calibre 380, un revólver marca tauro, calibre 38, que portaban sin documentos.
El hecho se produjo momentos en que los cuatro individuos en horas de la mañana de ayer lunes, fuertemente armados, se presentaron a una envasadora de gas localizada en el paraje Las Siete del sector el Portón, La Vega y realizaron el delito donde sustrajeron una indeterminada cantidad de dinero en efectivo, el DVR del lugar y algunos documentos bancarios importantes.
Tambíen despojaron al vigilante privado de la estación de la escopeta Maverick, calibre 12 Mm., de igual modo a otros empleados le quitaron varios celulares y sus documentos personales; además robaron lubricantes para vehículos, herramientas para cilindro y equipos de gas.
Posteriormente los malhechores se marcharon abordo del carro Toyota Corolla, color azul, año 1987, placa A443249, de la ruta RPA, ficha 016, de Santiago, en el cual viajaban.
Sin embrago, la Policía al enterarse del hecho delictivo activó la búsqueda de los antisociales a quienes los agentes lograron localizar en el llamado Cruce de la Muerte, en el sector Soto de La Vega y allí se produjo el enfrentamiento donde dos de ellos murieron por heridas de balas y los otros dos resultaron heridos y apresados.
Tras la captuta se les ocupó, además de la pistola y el revólver, la escopeta sustraída, propiedad de la empresa, una radio de comunicación, un paquete de tairrás, cintas adhesivas, los celulares, dinero en efectivo y las demás evidencias que fueron robadas, las cuales se recuperaron.
En cuanto a los dos apresados fueron enviados a la acción de la justicia, mientras que los cadáveres de los occisos fueron llevados al Instituto Nacional de Ciencias Forense (INACIF) para los fines procedentes.
