SANTO DOMINGO -. La gente no sale del asombro por la magia del mambero Omega para sacar escoltado por militares diez maletas del aeropuerto internacional “José Francisco Peña” de las Américas.
Es la segunda vez que Omega envía a una persona desconocidas a buscar sus equipajes sin que nadie lo toque en la terminal.
La primera partida de maletas eran tres y ahora en la segunda 7 maletas. Que contenían ninguna autoridad lo sabe y solamente Omega puede decir la mercancía de sus equipajes. No es raro que esto suceda, porque por ese aeropuerto entra y sale de todo incluyendo contrabandos de drogas narcóticas y dólares.
Universodeopiniòn.com supo de fuente confiable que en el país operan 30 oficinas de sicarios colombianos y mexicanos. Estos centros de operaciones tienen fachadas de empresas de mercadeo, relaciones públicas, de construcciones de edificaciones, transporte marítimo y aéreo, oficinas de abogados, dealer y bienes raíces.
Para los colombianos instalarse en el país aprovecharon que el Secretario de turismo doctor Rafael Subvertí Bonilla, convenciera al ex presidente Hipólito Mejìa Domínguez, en el sentido de que para desarrollar el turismo se debería permitir a los colombianos viajar sin visas a la República Dominicana. La medida fue dejada sin efecto por el presidente Mejía Domínguez atendiendo al reclamo de los sectores que luchan contra el narcotráfico.
El ex secretario de turismo Felucho Jiménez, logra que nuevamente se permita a los colombianos viajar sin visas al país. Las facilidades dadas por Subervì y Jiménez permitió los colombianos se establecieran en el territorio.
El crimen organizado y las redes internacionales de narcotráfico maniobraron por medio de sus representantes para que se impusiera el Código Procesal Dominicano cuyas consecuencias han sido funestas porque favorecen a los atracadores, violadores de menores, traficantes de drogas, de seres humanos, lavadores de dinero, homicidas y delincuentes. Logrando eso, ahora con la Policía Técnica Judicial (PTJ) tratan de restar autoridad y debilitar a la Policía Nacional, creando una isla de poder autónoma dependiente de la Procuraduría General de la República. Este plan maestro de la impunidad se está imponiendo paso a paso.
Los altos mandos de los organismos de inteligencia del gobierno han alertado sobre el particular sin que se tomen medidas trascendentales, mientras las acciones del crimen organizado y el narcotráfico aumentan.
Los casos de José David Figueroa Agosto, Ernesto Paulino Castillo, la matanza de Paya, Bani y de Arturo del Tiempo Márquez, este último apresado en España reflejan la peligrosa situación que vive el país.