Por Rafael G. Santana
En 1988 el general Barry Mccaffrey rindió un informe donde alertaba a la Casa Blanca sobre el peligro del consumo y el tráfico de drogas en los Estados Unidos de Norteamérica; Latino América y el Caribe.
Sobre este tema en el libro “De Los Maras a Los Zetas” de Jorge Fernández Menéndez y Víctor Ronquillo en las páginas 192 y 193 se resalta lo siguiente “El grave error de visión que tienen las autoridades de ese país (Estados Unidos), es creer que cuando la droga cruza la frontera, el propio Barry Mccaffrey y como han insistido sus sucesores. – Se pulveriza, ó sea que pasa directamente de los grandes carteles de las redes de distribución minorista, tratando de ignorar que existen etapas intermedias, tantas como las que se pueden imaginar por el simple hecho de que la distancia para llegar a la droga, por ejemplo, de El Paso a New York es mucho mayor que la que se debe transitar para hacerla llegar de la costa norte de Colombia al Caribe mexicano. Quizás por eso mismo es poco lo que se sabe de cómo operan y hasta dónde llegan esas redes en el propio Estados Unidos. Sin embargo, el tema tendría que ser de una importancia central: Como negocio, la cifra más conservadora de las utilidades que deja el trafico de cocaína (no incluye las demás drogas) en Estados Unidos es de 60,000 millones de dólares, aunque algunos especialistas la elevan hacia los 300,000 millones; lo más probable es que estemos hablando de una cantidad superior a los 100,000 millones.
Y según la casa blanca 90 centavo de cada dólar generado por la droga en Estados Unido entran al sistema financiero de ese país, lo cual implica que esas decenas de miles de millones de dólares deben ser lavados y, evidentemente, eso no puede realizarse, como se a dicho muchas veces a través de las casas de cambio fronteriza. Hay unos 20 millones de consumidores constantes de drogas en los Estados Unidos, de los cuales 6 millones son adictos. Un tercio de la población de 16 año acepta que a consumido marihuana la red de distribución involucran a millones de personas.” Esos datos demuestran el poder económico del microtrafico.
El informe de McCaffey en 1988 en la actualidad se queda corto porque el mercado del microtráfico aumenta día a día generando billones de dólares en el mundo.
La jefatura de la policía que comanda el Mayor General Manuel E. Castro Castillo, en los meses de julio y agosto la Dirección Central Anti-narcóticos (DICAN) de esa institución que dirige el Coronel Carlos v. Fernández Valerio ha incautado 102, 443.05 gramos en porciones de cocaína, crack y marihuana, un equivalente a 102.4 kilos; se han sometido a la justicia 1,535; puntos desmantelados 1,734; armas cortas 23; armas largas 10: vehículos de cuatro ruedas 20; motocicletas158; y balanzas 47; 343 celulares.
Esto demuestra que la DICAN en busca del micro encuentra la macro del trafico de drogas asestándole golpes contundentes. Además, de la excelente labor del jefe de la policía Mayor General Castro Castillo de apertura a la comunidad con la celebración de encuentros en los barrios; la sistemática labor de inteligencia que permite combatir sin tregua el crimen organizado; el patrullaje y la eficacia de las investigaciones sometiendo a la justicia a los respónsales de los hechos delictivos dan excelentes resultados.
El 75 por ciento de los delitos del día a día están relacionados con el micrográfico. Esto es más que suficiente para ponerle atención a este fenómeno que promueve la violencia, los atracos y otros delitos.
Felicitamos a la Jefatura de la policía y la DICAN por los resultados obtenidos en solo dos meses.
Adelante.